Una legislación pionera que transforma el panorama sanitario del país
ANKARA — El Parlamento de Turquía ha aprobado una ambiciosa reforma legal que permitirá la producción, distribución y venta controlada de productos de cannabis medicinal en farmacias autorizadas. La ley, denominada “Enmiendas a ciertas leyes relacionadas con la salud y el Decreto Ley No. 663”, marca un hito en la historia sanitaria y legislativa del país.
Supervisión estricta y enfoque médico
La normativa establece una distinción clara entre el uso medicinal y recreativo del cannabis. Los productos autorizados contienen bajos niveles de THC y no inducen efectos psicoactivos.
La producción estará regulada mediante una doble supervisión institucional:
- El Ministerio de Agricultura y Silvicultura controlará el cultivo y cosecha de cannabis.
- El Ministerio de Salud se encargará del procesamiento, licencias, distribución y ventas en farmacias.
Además, se implementará un sistema electrónico de trazabilidad para monitorear cada producto desde su origen hasta su dispensación.
Uso limitado a prescripción médica
Los derivados de cannabis solo podrán adquirirse en farmacias autorizadas, y su utilización estará limitada exclusivamente a pacientes con receta médica. Según expertos, estos productos se emplean como analgésicos y tienen efectos antidepresivos, especialmente para afecciones como:
- Dolor crónico
- Cáncer
- Esclerosis múltiple
- Epilepsia refractaria
Turquía se une a una tendencia mundial
Con esta reforma, Türkiye se suma a un grupo creciente de países como Alemania, Canadá, Israel, Australia y Países Bajos, donde el cannabis medicinal ya forma parte de los tratamientos clínicos aprobados por las autoridades sanitarias.
Declaraciones del sector farmacéutico
Taner Ercanli, miembro de la junta de la Asociación de Farmacéuticos de Türkiye, enfatizó la importancia de la regulación:
“Nos referimos a productos de grado farmacéutico, no a cannabis callejero ilícito. Estos están aprobados y regulados por el Ministerio de Salud y no tienen cabida en el mercado negro.”
Contexto cultural y económico
Aunque Turquía ha mantenido históricamente una postura prohibicionista, esta legislación refleja una evolución progresiva. El país ya permitía el cultivo de cáñamo industrial en varias provincias y el uso limitado de productos cannabinoides como Sativex desde 2016.
La nueva norma también podría tener implicaciones económicas:
- Impulso a la industria farmacéutica nacional
- Revitalización de zonas rurales mediante el cultivo regulado
- Reducción del mercado ilegal
Próximos pasos
La implementación requerirá esfuerzos multilaterales:
- Formación especializada para profesionales de la salud
- Desarrollo de instalaciones agrícolas y farmacéuticas
- Campañas públicas que informen y diferencien el uso médico del recreativo
