Desgraciadamente, aún en muchos países del mundo el consumo, la posesión o el tráfico de la marihuana está castigado duramente y además de penas de cárcel de muy larga duración, puede suponer la misma muerte. Hemos seleccionado para ti los 5 países del mundo donde se ejecuta la pena capital por el simple hecho de consumir, poseer o traficar con marihuana.
Singapur
En muchos aspectos sigue siendo un país de referencia para la comunidad internacional, es uno de los más ricos de Asia y sus niveles de bienestar social son altísimos si lo comparamos con otros países vecinos. Sin embargo, en los delitos relacionados con la marihuana sus políticas no son tan progresistas, más bien todo lo contrario. En Singapur, la simple tenencia o consumo de marihuana se penaliza directamente con el ahorcamiento, las sentencias que ha habido hasta ahora jamás han contemplado el indulto por lo que el 100% de los casos ha terminado finalmente en la pena máxima. A este deleznable hecho se le une los castigos físicos en el mejor de los casos, algunos de ellos realizados con una vara con la cual se azota al condenado.
Omán
En este para mucho desconocido país arábigo, el simple hecho de consumir marihuana puede suponer fuertes penas de cárcel de hasta 20 años y 50 latigazos. El tráfico de marihuana se castiga directamente con la muerte. 
Indonesia
En este bello país las condenas por posesión de marihuana pueden variar entre los 4 y los 20 años de cárcel y en el peor de los casos cadena perpetua o la pena de muerte. El gobierno indonesio no facilita datos sobre el número de condenados y las ejecuciones, pero en un informe de la prestigiosa organización Amnistía Internacional fechado en 2009 se considera a Indonesia como uno de los países con más ejecuciones por delitos de este tipo.
Emiratos Árabes
Este próspero país tiene una de las legislaciones contra la marihuana más duras del mundo, la pena mínima es de 4 años de prisión, pudiendo llegar incluso hasta la pena de muerte por decapitación en muchos casos. Estas fuertes penas no se aplican únicamente a los poseedores o consumidores de las sustancias, sino a las personas que puedan ser acusadas de ser cómplices del sospechoso, encubridores o simplemente haber inducido al delito investigado.
Taiwán
Fumar, poseer o traficar con cannabis es totalmente ilegal en Taiwan y la policía aplica la ley a rajatabla. El tráfico con esta sustancia se castiga directamente con la pena de muerte y por el simple hecho de fumar marihuana te pueden caer como mínimo 7 años de prisión.
Lo peor de todo es que en estos países como en la mayoría de los de la comunidad internacional, estas leyes tan represivas son de aplicación en todo su territorio nacional. Por lo tanto, ser un extranjero no te exime de cumplirlas, en el caso de ser condenado tendrás que cumplir íntegramente la pena en el país a no ser que te concedan la extradición a tu país de origen. La embajada de tu país apenas te podrá asesorar y en ningún caso podrá evitar la ejecución de la sentencia.
A todo esto se le une el hecho de que el sistema judicial o las garantías de un proceso justo para el acusado en muchos de estos países no son las mismas que en Occidente, por lo tanto, en demasiadas ocasiones se producen juicios sin las debidas garantías legales en los que el claro perjudicado es el condenado.
Si decides viajar a uno de estos bellos países, ten en cuenta lo aquí expuesto y evita en todo lo posible siquiera acertarte a cualquier sustancia considerada ilegal en la región. Desgraciadamente, los casos de extranjeros condenados a fuertes penas de cárcel o directamente ejecutados son más numerosos de lo que creemos.
