Ahora va y resulta que la marihuana es un activo para cotizar en bolsa. Los bancos ya invierten en marihuana, lo cual es buena señal: un mercado que no tenga perspectivas de crecer no sería del interés de inversores como BBVA, Bankinter, La Caixa o Caixabank, las cuatro entidades españolas que han comenzado a apostar por el nuevo “oro verde”.
Pero a pesar de que el de la marihuana sigue siendo un negocio de riesgo, donde la mayoría de empresas son de reciente creación y con flujos negativos, los números están saliendo. Los bancos españoles apuntan a la parte más estable de la industria: las grandes productoras.
BBVA es la entidad que más fuertemente ha apostado, con cerca de 3 millones de dólares repartidos entre las tres productoras más grandes del mundo, que resultan ser canadienses: Canopy Growth, Aurora Cannabis y Aphria. De la primera, Canopy Growth, BBVA ha adquirido 58 mil acciones por un millón de dólares. Se trata de la productora de cannabis más grande por capitalización: el año pasado ingresó en bruto 57 millones de dólares y triplicó desde octubre su valor en bolsa. De Aurora Cannabis, BBVA se ha hecho con 139 mil acciones por 1,1 millones de dólares, una compañía que desde 2016 ha crecido… ¡¡¡un 1500%!!! Y de Aphria, compañía que recientemente se fusionó con Nuuvera, ha adquirido 69 mil acciones por 800 mil dólares.
El cambio de estatus legal que está viviendo este activo (sí, aún suena raro referirse a esa cosa que tenemos que llevar y consumir a escondidas como “activo”) en América está impulsando las inversiones.
El cannabis medicinal está autorizado en 29 estados de EEUU y el consumo recreativo en 10 de ellos; en Canadá ya ya es legal el consumo recreativo (además de ser la sede de las productoras más grandes del mundo); Uruguay es el primer país en legalizar totalmente la marihuana desde 2013… Mientras, en Europa las cosas van más despacio, pero van, y conforme se fortalece el lobby del sector, es presumible que las legislaciones vayan aflojando la correa hacia la legalización, que, tenemos confianza, tarde o temprano llegará.
Pero esta actitud optimista de la banca hacia la marihuana no es universal. Algunas entidades rehúsan operar con las empresas y particulares que se dedican al negocio del cannabis, como Banco Santander, que cerró cuentas en Uruguay relacionadas con el negocio del cannabis, pese a su legalización total en el país suramericano.
Mientras que, como vemos, BBVA no tiene ningún problema con las operaciones relacionadas con el nuevo oro verde, el año pasado Banco Santander Uruguay decidió cerrar las cuentas bancarias de las farmacias de Uruguay que venden cannabis legal. El mismo presidente Mújica afirmó al respecto: “no quiero pensar que deliberadamente se está beneficiando al narcotráfico o que el narcotráfico tiene una influencia tan grande que puede determinar políticas de frenar una iniciativa de este tipo” y calificó la acción de Banco Santander como “una forma de matar burocráticamente una ley que ha salido del Parlamento Uruguayo”.
Ni BBVA ni La Caixa me han dado soporte alguno para una tienda que hemos montado en junio, desde el año pasado su política no contempla trabajar con CBD ni marihuana.
Ni BBVA ni La Caixa me han dado soporte alguno para una tienda que hemos montado en junio, desde el año pasado su política no contempla trabajar con CBD ni marihuana.