Suiza está llevando a cabo un ambicioso proyecto piloto para evaluar los efectos de la venta regulada de cannabis con THC. Este estudio, el más grande de su tipo en el país, busca determinar si la legalización puede reducir el mercado negro y mejorar la seguridad de los consumidores. A diferencia de otros países que han legalizado el cannabis sin estudios previos, Suiza ha optado por un enfoque meticuloso basado en datos científicos y evidencia empírica.
El contexto histórico de la regulación del cannabis en Suiza
La regulación del cannabis en Suiza ha evolucionado significativamente en las últimas décadas. A principios del siglo XX, el cannabis fue prohibido bajo la Ley Federal de Estupefacientes de 1951. Sin embargo, con el tiempo, la percepción pública sobre la sustancia ha cambiado, lo que ha llevado a reformas progresivas. En 2013, se despenalizó la posesión de hasta 10 gramos para consumo personal, aunque el cannabis con más del 1% de THC sigue siendo ilegal.
En 2021, una enmienda a la Ley Federal de Estupefacientes permitió la realización de estudios piloto sobre la dispensación de cannabis con fines no médicos. Estos ensayos buscan sentar las bases para una futura regulación legal y han sido clave para el desarrollo del actual proyecto en el cantón de Zúrich.
El estudio piloto en Zúrich: metodología y objetivos
El estudio en el cantón de Zúrich involucra a 4.400 participantes de entre 18 y 80 años, lo que lo convierte en el mayor estudio sobre cannabis realizado en Suiza. Su objetivo principal es analizar el impacto de la venta regulada en farmacias y tiendas especializadas, comparando los hábitos de consumo y la satisfacción de los consumidores con respecto al mercado ilegal.
Los participantes pueden acceder a hasta 10 gramos de THC al mes, bajo supervisión de la Oficina Federal de Salud Pública. La facilidad de acceso a dispensarios y farmacias es clave para garantizar que los consumidores no recurran a fuentes ilegales. Además, el estudio examina la calidad de los productos, la seguridad en la compra y los efectos en la salud pública.
Resultados preliminares: reducción del mercado negro
Los primeros datos del estudio muestran que los consumidores de THC prefieren adquirir productos en establecimientos legales en lugar de recurrir al mercado negro. Esto se debe a la calidad garantizada de los productos y la seguridad en la compra. Además, los participantes han expresado una mayor satisfacción con la marihuana adquirida en tiendas reguladas en comparación con la obtenida de vendedores ilegales.
Uno de los aspectos más destacados del estudio es que los dispensarios, farmacias y tiendas de cannabis deben estar ubicados a no más de 30 minutos en transporte público de los hogares de los participantes. Esta accesibilidad es fundamental para garantizar que los consumidores opten por fuentes legales en lugar de recurrir al mercado negro.
Comparación con Alemania: enfoques opuestos
Mientras Suiza avanza con su experimento, Alemania enfrenta obstáculos en la implementación de sus propios proyectos piloto. La incertidumbre política y las restricciones burocráticas han retrasado la legalización en el país vecino. En contraste, Suiza ha demostrado que un enfoque basado en datos y evidencia científica puede ser más efectivo para diseñar políticas de drogas.
El gobierno alemán había anunciado proyectos modelo para la regulación del cannabis, pero su implementación sigue siendo incierta bajo la administración actual. La diferencia clave entre ambos países radica en la metodología: mientras Suiza realiza estudios exhaustivos antes de tomar decisiones legislativas, Alemania enfrenta dificultades para iniciar sus proyectos.
Impacto social y económico
El estudio también analiza el impacto económico de la legalización. Se espera que la venta regulada de cannabis genere ingresos fiscales y reduzca los costos asociados con la persecución del tráfico ilegal. Además, la accesibilidad de los dispensarios y farmacias es clave para garantizar que los consumidores no recurran a fuentes ilegales.
Otro aspecto importante es la reducción de la influencia del crimen organizado en el mercado de drogas. La legalización permite un control más seguro del consumo y evita que los consumidores tengan contacto con traficantes que podrían ofrecer otras sustancias más peligrosas.
Conclusión: un modelo a seguir
Los resultados preliminares sugieren que la legalización del cannabis puede ser una herramienta eficaz para combatir el crimen organizado y mejorar la seguridad pública. Suiza está demostrando que un enfoque basado en la investigación y la regulación puede ofrecer beneficios significativos.
Si el estudio continúa mostrando resultados positivos, es probable que el Consejo Nacional suizo avance en la aprobación efectiva de los productos de cáñamo. Esto convertiría a Suiza en un referente en la regulación del cannabis en Europa, estableciendo un modelo basado en la evidencia científica y la protección de la salud pública.
